La calle de Don Pedro está situada entre la plaza de Gabriel Miró y la Puerta de Moros, en el famoso barrio de La Latina.
Antiguamente, esta calle se conocía por el nombre de Alcantarilla, hasta que en 1770, Don Pedro Álvarez de Toledo, marqués de Villafranca del Bierzo se adjudicó estos terrenos y edificó su palacio.
La calle recibe el nombre de pila Don Pedro Álvarez de Toledo debido a que tenía una personalidad cercana con los habitantes y no quería que le llamasen por su título nobiliario.
Y es que Don Pedro Álvarez de Toledo no fue el único Pedro famoso que vivió aquí, sino que el famoso poeta Pedro Salinas, integrante de la Generación del 27, vivió durante un tiempo en el número 6.
¿Qué hacer en la Calle de Don Pedro?
En la calle de Don Pedro se puede encontrar una gran variedad de edificios históricos además de una gran y estupenda oferta gastronómica como algún restaurante mexicano u entre otros establecimientos.
Edificios con solera en Calle de Don Pedro
En el primer intervalo de esta calle, que transcurre entre la plaza de Gabriel Miró hasta la calle de Bailén, se encuentra el edificio del Grupo Escolar Vázquez de Mella, edificado en los años 30 por el arquitecto Bernardo Giner de los Ríos.
En el perímetro que constituye la calle Bailén con las de Don Pedro y Redondilla, hay un viejo Laboratorio Municipal de Higiene que durante los años 1898 y 1932 fue coordinado por el farmacéutico madrileño César Chicote y del Riego. Este edificio fue un sitio de vacunación de referencia y sirvió como refugio durante la Guerra Civil. Actualmente está habitado por el International Lab.
Si continuamos en sentido a Puerta de Moros nos toparemos con el Colegio Sagrado Corazón, fundado en 1877 por las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl. El edificio está hecho de ladrillo visto y tiene un aspecto neomudéjar.
Palacio del Marqués de Villafranca
Pero sin duda alguna, el edificio más importante y famoso de esta conocida calle es el antiguo palacio del Marqués de Villafranca, construido en el siglo XVII y que edificó usando la vieja muralla medieval como pared maestra.
El palacio tuvo varias remodelaciones debido a su antigüedad y ha sido testigo de numerosos actos en sus maravillosos salones. Y es que en este palacio se han dado cita los personajes literarios y artistas más reputados de su época.
Posteriormente este palacio fue ocupado por uno de los restaurantes más lujosos de la zona, el restaurante Puerta de Moros. Más tarde pasó a estar ocupado por la Agencia Española de Aceite de Oliva y finalmente pasó a estar ocupado por la Real Academia de Ingeniería.
La parte externa del palacio es sencilla y elegante, con muros rojos y balcones encuadrados por dovelas blancas. El palacio se adueña de múltiples números de la calle y muestra tres portadas, una de ellas con una preciosa puerta de madera.
La última sorpresa
Antes de finalizar la calle nos encontramos con una última sorpresa, el palacio del Duque del Infantado, hoy habitado por la Escuela de Negocios del CEU.
El edificio es solo una sección del global que constituye el maravilloso palacio de los Duques del Infantado. En la actualidad se puede observar reformado, pero no ha perdido ni un ápice la altanería que le identificaba cuando fue estrenado en el siglo XVII.
La calle de Don Pedro sigue fascinando a toda persona que pasea por ella gracias al tiempo tranquilo y pausado que nos brindan sus maravillosas edificaciones.
Y tú, ¿conocías ya alguno de estos lugares? ¿A qué estás esperando para pasar un rato por esta emblemática calle y sus alrededores?
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